Interlocutor: ¿Puedes hacer algún comentario sobre la oración de petición?
Francis Lucille: La oración que demanda es una oración subalterna de la oración. Su única ventaja es que reconoce la Presencia divina.
Y la oración que no pide nada es una oración superior. Pero incluso ahí hay grados; por ejemplo: "Hágase Tu voluntad". Esta oración puede ser dicha en dos sentidos distintos.
En una forma inferior sería dicha con resignación: "Hágase Tu voluntad, no es eso lo que yo escogería pero, en fin, Tú eres el jefe"...
Y una forma superior sería: "Hágase Tu voluntad porque Tú sabes mejor que yo lo que me conviene". Pero todavía hay una forma superior que es: "Hágase Tu voluntad porque yo sé que eso es lo que conviene". Esta oración superior no tiene que expresarse, de hecho, es silenciosa. Como no hay nada que pedir por qué hablar.
I: Pienso que llega un momento que no sé ni lo que es bueno ni lo que es malo.
FL: Sí, pero incluso llega un momento en el que sabemos que todo está bien.
Robert Adams decía: "Todo está bien y se despliega como debe".
(Pasaje del Encuentro de Enero de 2012. Disponible en "Descargas")